Si la religión en todos lados fuera así...

Les dejo esta bienvenida que se encuentra en la entrada de Grace Cathedral, en San Francisco, California. La tolerancia que predica debería de ser la misma en todas las religiones. Para los que se sienten poseedores de la verdad última, pues que pena. No le hago a eso.
Va el original en inglés y la traducción que le hice al español.

When you enter Grace Cathedral, This immunity, this anonymity, this unity are pledged to you. May your time be blessed.

A Place of Religious Immunity

If you are passing by and feel intimidated or angry because of religion, please know that there is immunity granted when you enter Grace Cathedral. Immunity from the ravages of religion and misuse of Divine revelation. You know from the past about inquisitions and crusades and witch hunts. You live in a time of religious military zealots, abortion clinic bombings, and TV evangelists attempting to take power in our land. How to avail oneself of the soul-inspiring testimony of religion through the ages and, at the same time, receive some guarantee of immunity from the power perversions that so often follow in the wake of religious strivings? How to find persuasiveness rather than coercion and will-to-dominate in religion? An answer is Grace Cathedral. Here operates an unconditional surrender to the freedom of God to speak to whomever in whatever language is understandable. In this space you can walk the labyrinth of life to the tune of the Spirit which you uniquely hear. Immunity from religious control is granted you upon entry. Grace offers "sanctuary" to everyone and promises this glorious freedom of God as the climate to explore the healthiest living that religion affords.

A Place of Anonymity

If you are passing by and feel hesitant to join the ranks of a particular denomination or to buy into the creeds of millions, please know that most people who enter Grace every week are practicing no particular religious discipline. The rule of Grace is the stranger making himself/herself at home. All names are sacred here, but no one has to contribute one's name to a membership list to be taken seriously, Perhaps you quietly dropped by wanting to reconnect in your relationship with God. Or to confess shame. Or to surrender a burden. Or to pray for a loved one. Or to bask in the beauty of holiness. Or to meditate on a hard personal dilemma. Or to find a moment of peace. A cathedral has a high ceiling and long aisles to allow the contained soul an opportunity to venture forth in multiple directions without the encumbrances of forced community. Grace offers ages of spiritual space to which anonymous individuals may be on pilgrimage.

A Place of Unity

If you are passing by and feel that life is fragmenting into a vast number of irreconcilable, shattered pieces, then know that Grace holds an outrageous hope that, in God alone, all aspects of life are in unity. We believe that God is the Alpha, so in the beginning all aspects were in unity with God. God is the Omega, so at the end all aspects will be in unity with God. Now in the meantime, this unity exists in the brave hope of those who worship God. Grace seeks to keep this hope of ultimate unity alive. So we are called to extravagant hospitality "to all sorts and conditions" in the confidence that a gracious welcome is central to a cathedral's purpose. And yes, we are part of a specific religious tradition (Episcopal Church of the Anglican Communion). But we are so, not because one religious tradition exclusively contains all truth, but because when one goes on a long journey toward ultimate unity, one has to depart from one specific place. Grace Cathedral, Episcopal Diocese of California, is our last point of departure. And our companion and ultimate confidence is in the journey of Jesus Christ. We believe him to be the clear manifestation of God's love for the whole world and the expression that all life is in ultimate unity even beyond the finality of death. In the midst of what appears to be an ever-increasing fragmentation of life, Grace offers a House of Prayer for All People, an abiding hope that there is a Oneness at the centre of life.

When you enter Grace Cathedral, this immunity, this anonymity, this unity are pledged to you. May your time be blessed.

William E. Ewing

Bishop of California

Al entrar en Grace Cathedral, esta inmunidad, este anonimato, esta unidad se han comprometido con usted. Que su tiempo sea bendecido.

Un lugar de inmunidad religiosa

Si usted iba de paso y se siente intimidado o enojado debido a la religión, por favor debe saber que se le concede inmunidad al entrar en la Catedral de la Gracia. Inmunidad de los estragos de la religión y el mal uso de la revelación divina. Usted conoce el pasado de inquisiciones, cruzadas y cacerías de brujas. Usted vive en una época de fanáticos militares religiosos, bombardeos en clínicas de abortos, y evangelistas de televisión que tratan de tomar el poder en nuestra tierra. ¿Cómo servirse del testimonio del alma inspiradora de la religión a través de las edades y, al mismo tiempo, recibir alguna garantía de inmunidad frente a las perversiones de poder que tan a menudo siguen en la estela de luchas religiosas? ¿Cómo encontrar la persuasión en lugar de la coerción y la voluntad de dominar en la religión? Una respuesta es la Catedral de la Gracia. Aquí opera una entrega incondicional a la libertad de Dios para hablar con quien sea en cualquier idioma que sea comprensible. En este espacio usted puede caminar por el laberinto de la vida con la música del Espíritu que usted únicamente puede escuchar. Inmunidad del control religioso se le concedió al entrar. Grace ofrece "santuario" a todo el mundo y promete la libertad gloriosa de Dios, como el clima para explorar la vida más saludable que la religión ofrece.

Un lugar para el anonimato

Si usted está de paso y se siente reticentes a unirse a las filas de una denominación particular o comprar las creencias de millones de personas, por favor sepan que la mayoría de las personas que ingresan a Grace todas las semanas practican ninguna disciplina religiosa en particular. El deseo de Grace es hacer sentir al extraño en casa. Todos los nombres son sagrados aquí, pero nadie tiene que contribuir con su nombre a una lista de miembros para ser tomado en serio. Tal vez llegó calladamente con el deseo de volver a conectar en su relación con Dios. O para confesar una pena. O para aliviarse de una carga. O para orar por un ser querido. O para disfrutar de la belleza de la santidad. O, para meditar en un dilema personal difícil. O para encontrar un momento de paz. Una catedral tiene un techo alto y largos pasillos para permitir que el alma tenga la oportunidad de aventurarse en múltiples direcciones, sin los estorbos de la comunidad forzada. Grace ofrece amplios espacios espirituales en los cuales los individuos anónimos pueden mantenerse en su peregrinación.

Un lugar para la Unidad

Si usted está pasando y siente que la vida se está fragmentando en un gran número de piezas irreconciliables, destrozados, entonces sabemos que Grace tiene una esperanza provocadora que, sólo en Dios, todos los aspectos de la vida están en la unidad. Creemos que Dios es el Alfa, así que en principio todos los aspectos estaban en la unidad con Dios. Dios es el Omega, por lo que al final todos los aspectos de la vida serán en la unidad con Dios. Ahora, mientras tanto, esta unidad existe en la esperanza valiente de aquellos que adoran a Dios. Grace trata de mantener con vida la esperanza de esta unidad última. Por eso estamos llamados a la hospitalidad extravagante "a todas las clases y condiciones" en la confianza de que una bienvenida amable es central al propósito de una catedral. Y sí, somos parte de una tradición religiosa concreta (la Iglesia Episcopal de la Comunión Anglicana). Pero lo somos, no porque una tradición religiosa contenga exclusivamente toda la verdad, sino porque cuando uno va en un largo viaje hacia la unidad final, uno tiene que empezar en un lugar específico. Grace Cathedral, la Diócesis Episcopal de California, es nuestro punto de partida. Y nuestro compañero y confianza últimas están en el camino de Jesucristo. Creemos que él es la clara manifestación del amor de Dios para el mundo entero y la expresión de que toda vida es una última unidad, incluso más allá de la finitud de la muerte. En medio de lo que parece ser una creciente fragmentación de la vida, Grace ofrece una Casa de Oración para todas las personas, con la esperanza constante de que hay una Unidad en el centro de la vida.

Al entrar en la Catedral de la Gracia, esta inmunidad, este anonimato, esta unidad se han comprometido con usted. Que su tiempo sea bendecido.

William E. Ewing

El obispo de California